Qué es la Colpofobia y cómo superarla
Se trata de la Colpofobia o miedo a los genitales femeninos, una fobia que los expertos advierten que no debe tomarse a la ligera.
Se trata de la Colpofobia o miedo a los genitales femeninos, una fobia que los expertos advierten que no debe tomarse a la ligera.
Cualquiera puede tener miedo a cualquier cosa. Pero, ¿realmente es así? ¿Significa realmente que el miedo puede ser a cualquier cosa? ¿Puede ser miedo a los genitales femeninos y además a los femeninos? Aunque suene raro, sí, hay personas que tienen fobia a los genitales femeninos. Este miedo o se conoce como Colpofobia.
La Colpofobia sólo parece ser un tipo de miedo inusual, pero en realidad podría ser uno muy serio. El que sufre de este miedo trataría de escapar de las mujeres durante casi todo el tiempo. Ahora bien, es muy obvio que casi todo el mundo se enfrenta, en realidad, a los genitales femeninos una o más veces en su vida. Así que, las personas que son colpofobicas, se sienten muy incómodas cuando están alrededor de una mujer.
Esta situación provoca en el individuo un rechazo al contacto sexual, a partir del cual se desarrollan complejos, o incluso terror a un encuentro sexual o semi-sexual. Esta fobia se manifiesta con sudoración, ansiedad y un malestar latente en el sujeto debido a los nervios que le provoca mantener relaciones con sus parejas.
La colpofobia es un trastorno muy peculiar cuyas causas aún no se han especificado. Sin embargo, algunos especialistas ofrecen hipótesis de que quienes padecen esta fobia pueden haber sido expuestos prematuramente y de forma vulgar a los genitales (tanto físicamente como a través de medios externos, como revistas o películas), e incluso podría existir una situación de acoso sexual infantil.
Algunas de estas causas, que pueden ser variadas, son: la violación, el acoso sexual por tener un miembro genital grande en los hombres, tener una vulva deformada, la exposición temprana a contenidos visuales impactantes, relacionados con la fisonomía del aparato reproductor.
El origen de la aversión está en una experiencia del pasado. Sepúlveda (especialista en el caso) indica que muchas de estas experiencias traumáticas se producen a una edad muy temprana y, en algunos casos, provocadas por un miembro de la familia o un amigo cercano.
Esta fobia es poco frecuente y muy grave. Puede perturbar el comportamiento de una persona y crear miedo sexual junto con ansiedades psicosexuales. Las personas que padecen colpofobia tienen problemas para entablar una relación con una mujer o se sienten incómodas con ella.
El miedo a las mujeres y el miedo a los genitales femeninos a menudo se malinterpretan, la gente piensa que son lo mismo pero no, la Colpofobia es diferente en esto la persona teme los genitales femeninos: la vagina y no se siente cómoda alrededor de las mujeres. Un caso extremo de Colpofobia puede llevar al miedo a las mujeres. La fobia puede hacer que la persona lleve un estilo de vida homosexual.
Ansiedad psicosexual: Es un trastorno causado por la condición sexual y física en el que la persona está mentalmente perturbada y se enfrenta a problemas psicológicos debido a la sexualidad. Las ansiedades psicosexuales son comunes en las personas que sufren eurotofobia porque tienen el estrés de encontrarse con los genitales femeninos durante las relaciones sexuales. Pensar en los genitales femeninos les pone nerviosos y les estresa, lo que provoca ansiedad psicosexual.
Miedo sexual: la colpofobia puede derivar en miedo sexual si no se trata inmediatamente. El miedo sexual es el miedo a tener sexo o relaciones sexuales con la pareja respectiva. Si una persona se enfrenta a la colpofobia, esta fobia puede ser un problema en cualquier relación normal en la que la pareja que va al estímulo fóbico puede no ser cómodo tener relaciones sexuales y tiene miedo de los genitales femeninos.
Evidentemente, cuando no hay síntomas ni causas definidas de la colpofobia. Por lo tanto, de nuevo el tratamiento variaría de una persona a otra. Se puede tratar incorporando sesiones de terapia o utilizando medicamentos o algunos otros métodos, cualquiera de los que más convenga al afectado.
La terapia de choque podría ser una solución. El terapeuta confronta a la persona con una gran cantidad de imágenes femeninas. En los primeros días, podría ser una experiencia impactante o terrible para el enfermo, pero más adelante, adquirirá más confianza. El encuentro con una mujer se convertirá en un miedo menos terrible y más inexistente para el enfermo.
Otros expertos creen que esas terapias directas pueden ser perjudiciales. Para ellos, la única terapia eficaz es ahondar en el origen y descubrir qué causó esa fobia mediante terapias de largo alcance.
La fobia no es un problema común sino serio. Pero hay que creer que todos los problemas tienen solución, al igual que toda enfermedad tiene cura. La colpofobia no puede tratarse por completo, pero desaparecerá con el tiempo. Hay terapeutas y médicos que pueden ayudar a superar nuestros miedos. Hay que recordar siempre que el miedo es la parte más débil de nuestro cerebro. Podemos superar nuestros miedos creyendo en nosotros mismos.