El sexo sin ataduras puede ser tentador, pero sólo si no buscas una relación.
Vivimos en la edad de oro de la televisión. Para demostrarlo, basta con echar un vistazo a la selección de series originales de Netflix y a los mejores programas de todo el mundo. Además de todas las series atractivas y rompedoras como Love Island, Are You The One?, Ex On The Beach y Dating Naked, cada vez se ve más sexo. Sexo caliente. Sexo poliamoroso. Sexo normativo no heterosexual. La plataforma digital estrena la primera temporada de este concurso en el que los participantes no pueden tener sexo de ningún tipo.
Si el pasado invierno arrasó La isla de las tentaciones (un reality en el que se pone a prueba la fidelidad de un grupo de parejas), ahora lo que toca es Jugar con fuego (Too Hot Too Handle), un programa que se puede ver a través de la plataforma digital Netflix y del que ya se ha estrenado la primera temporada, compuesta por ocho episodios. La idea es que los participantes, completamente desconocidos entre sí, sean capaces de mantener la castidad (nada de besos ni relaciones sexuales, ni con otros ni consigo mismos) para conseguir el premio de 200.000 dólares.
A primera vista, parece fácil… Pero en su lugar, no lo es. Porque los catorce participantes (diez del primer episodio y otros cuatro que se incorporaron a lo largo de la temporada) tienen serios problemas para mantenerse alejados de la tentación: son casi adictos al sexo y alérgicos al compromiso. El programa se considera una versión moderna del género clásico de los dating shows, con su banda sonora optimista, sus imágenes vibrantes y sus retos humorísticos. Ha sido especialmente popular entre el público joven.
Averigüemos por qué la gente disfruta viendo Playing with Fire.
La dinámica del programa
La idea del concurso es que el grupo aprenda a establecer relaciones duraderas que vayan más allá del “si te pillo, no respondo por mí”. Como esto no estaba en sus planes (de hecho, pensaban que el retiro era para practicar sexo desenfrenadamente), el encierro es muy duro para ellos: jacuzzis, masajes, duchas a solas. Para favorecer su desarrollo afectivo, se organizan diversos talleres para fomentar la confianza entre las parejas que están mejor juntas. También tienen una pulsera electrónica que se pone verde cuando son capaces de vincularse y tienen libre acceso para besarse, tocarse y hacer lo que quieran.
¿Qué ocurre en cada episodio?
Poco a poco se van formando pactos de amistad entre grupos de hombres y grupos de mujeres, que se turnan para evitar completamente a los demás por su excitación y para perder voluntariamente miles de dólares por hacer guarradas durante unos segundos, lo que suele ocurrir tras unas cuantas noches de copas. Las relaciones reales se desmoronan, se introducen nuevos personajes y una serie de retos sexys, incluida una suite de fantasía sin contacto sexual, se presentan como pruebas para ver si las concursantes han hecho alguna introspección puritana. Las reglas se hacen cumplir mediante cámaras que funcionan las 24 horas del día y una inteligencia artificial parecida a Alexa llamada Lana, que anuncia las penalizaciones, los emparejamientos nocturnos y otros dramas varios.
¿Quién es Lana?
La inteligencia artificial de Playing with Fire es Lana, una voz que actúa como anfitriona y guía del programa. Da instrucciones a los concursantes sobre las tareas y las reglas, y les ayuda a entablar relaciones. Los concursantes de Playing with Fire suelen admirar la inteligencia de Lana y su capacidad para interpretar el comportamiento humano. Se refieren a ella como una “sabia cibernética” y aprecian su orientación a la hora de entablar relaciones.
La luz verde
Durante el cuarto episodio, Lana introdujo unos relojes luminosos que permitían a los concursantes saltarse las reglas, probablemente porque se dieron cuenta de que el programa sería aburrido si nadie se besaba nunca. Sin embargo, Lana declaró que esto era para fomentar conexiones más profundas más allá de lo físico. Si la luz de un reloj parpadeaba en verde, significaba que se había formado una conexión genuina y las dos personas podían besarse. No, esto no se basaba en ningún tipo de ciencia del ritmo cardíaco ni en nada respetable. Pero nadie lo cuestionaba, sólo esperaban obtener la luz verde.
¿Qué realidades similares a Jugar con fuego hay en el mundo?
Otras versiones internacionales de Jugar con fuego son: Game of Love (Brasil), Fire Island (Alemania), Temptation Island (Finlandia), All Of Us Are Looking For Love (Israel) y No Fuego, Por Favor (Colombia). Jugando con fuego es un reality similar a Playing With Fire. Sigue a un grupo de 12 hombres y mujeres solteros que buscan el amor mientras intentan ganar un premio en metálico sin intimar demasiado entre ellos.