La felicidad: Preguntas para hacerse en 2023
La felicidad es una habilidad que se puede dominar
La felicidad es una habilidad que se puede dominar
Tal vez su definición de felicidad incluya pasar mucho tiempo con sus seres queridos. Tal vez incluya una carrera satisfactoria. Esas pequeñas y grandes cosas pueden añadir alegría a tu vida y mejorar tu bienestar emocional. Pero la felicidad también se crea a diario a través de pensamientos y hábitos intencionados.
La vida actual es impredecible. A veces, nos trae alegría en abundancia, y otras veces, nos arrebata nuestros pequeños momentos de felicidad, convirtiéndolos en desesperación. Cuando las cosas no salen como esperamos, a menudo nos culpamos por no hacernos las preguntas adecuadas y tomar las decisiones correctas.
En medio de todo esto, olvidamos que las cosas buenas de la vida llevan su tiempo y que, ante las preguntas más difíciles, ignorarlas no es una solución. Aunque la respuesta no llegue al instante, acabará llegando, justo en el momento adecuado.
Aunque tiene sentido que sentir agradecimiento por todas las cosas que tienes (y que son tan fáciles de dar por sentadas) de forma regular te convierta en una persona más contenta con el tiempo, hay ciencia real detrás de este pensamiento, ser agradecido puede mejorar literalmente tu felicidad.
Entre el estrés del trabajo y los proyectos, las responsabilidades diarias en casa y el trabajo emocional que supone hacer que todo suceda, es fácil olvidarse de divertirse. Pero centrarse en disfrutar a diario, aunque sea con pequeños pasos muy sencillos, puede dar resultados drásticos en lo que se refiere a la felicidad a largo plazo. Cada mañana, pregúntate qué te aportaría alegría.
Tal vez sólo quiera inyectar más risas a su día bromeando mientras realiza las tareas con sus compañeros de trabajo. Tal vez le encantaría reservar una cita para hacerse las uñas después del trabajo. Dar un paseo durante la pausa para comer. Cómprate una vela nueva y date un baño.
Sea lo que sea, no tiene por qué ser grande, caro o llevar mucho tiempo. Pero esforzarte por disfrutar cada vez que te levantes y sigas con tu rutina te hará más feliz independientemente de lo que acabe ocurriendo durante el día.
A menudo dejamos de lado nuestras relaciones para centrarnos en el trabajo, pero pasar tiempo con la gente (sobre todo con la gente feliz) puede ayudarnos a experimentar más alegría.
Cuando interactúas con otras personas, ¿te centras más en tener razón o en disfrutar del tiempo que pasáis juntos? Esto último te ayudará a ser más feliz.
El miedo implica juzgar, centrarse en lo que está mal, el resentimiento, la ira, la culpa y la vergüenza. La pasión, en cambio, se basa en el optimismo, el empoderamiento, la gratitud y un profundo deseo de centrarte en lo que quieres crear para hacer las cosas aún mejor.
Vivir alineado con tus valores y creencias más profundos te hará feliz en última instancia. Los seres humanos son más felices cuando están viviendo su vida con cómo imaginan que sería su vida. Imagina en qué consistirá tu vida si vives alineado con tus valores y creencias. ¿Serías una persona más feliz? Se trata de pasar a la acción con aquello en lo que crees y comprometerte cada día a vivir tus valores.
Existen 6 necesidades humanas que experimentamos. Estas 6 necesidades humanas consisten en certeza, variedad, significado, conexión y amor, crecimiento y contribución. Tómate un momento cada mañana y aclara cuáles son tus necesidades humanas.
¿Sabes por qué vas a trabajar cada día? ¿Te parece que estás constantemente atrapado en una “rutina agotadora”? Para ser feliz, tienes que saber por qué haces lo que haces. ¿Cuál es la razón por la que te levantas por las mañanas y vas a trabajar? Debes experimentar una pasión detrás de tus acciones. Sin pasión, es fácil quedarse atrapado en una rutina aburrida y monótona. Busca dentro de ti y ten claro por qué vas a trabajar.
Una parte importante de ser feliz es tomarse tiempo para relajarse. Y esto no significa que pases una hora cada noche en Facebook. La meditación es una forma estupenda de calmar la mente, al igual que dormir bien.
A menudo nos centramos en el pasado con remordimientos o nos preocupamos por el futuro, dos cosas que pueden mermar nuestros niveles de felicidad. Intente estar más presente. Y cuando pienses en el pasado, perdona lo ocurrido y utiliza las experiencias difíciles como oportunidades de aprendizaje. Cuando pienses en el futuro, céntrate en lo que quieres que ocurra.